Estás muerto, condenado y perdido. Mereces una muerte sin fin, debido a tu propia maldad. [...]
«Los que estaban sentados a la mesa con El comenzaron a decir entre sí: ¿Quién [...]
Uno de los pensadores más grande en conocimiento y sabiduría de la Iglesia primitiva fue [...]
Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús, el cual, siendo [...]